Reconocimento a estudiantes y docentes en Institución Educativa de Sincelejo

La Institución Educativa San Vicente de Paul de Sincelejo, Sucre, en su política de mejoramiento hace un reconocimiento a los estudiantes y docentes más destacados, estimulando así el desempeño del talento humano.

En la mayoría de nuestras instituciones educativas se volvió una constante rutinaria la dedicación y resaltación de las acciones negativas de los estudiantes y de la misma comunidad educativa.
En efecto, en la crisis existente en las relaciones entre la escuela, la familia y la comunidad, el común denominador lo constituye las quejas, ya sea porque el estudiante no rinde lo suficiente, no cumple con los compromisos académicos, no llega puntual a clases, es continua su inasistencia, se escapa de clases ante el menor descuido o irrespeta a compañeros y profesores, entre otras y aunque esta es una cruda realidad, su tratamiento equivocado hace que la familia se ausente aun más y quizás muestre tanta indiferencia por la percepción que ha ido formando al pensar que asistir a una cita o reunión al plantel educativo en donde se educan sus hijos, equivale a recibir el rosario de situaciones negativas, por motivos del bajo rendimiento o por indisciplina o rebeldía, siendo contadas las excepciones al respecto.
Sin embargo, en La Institución Educativa San Vicente de Paúl de Sincelejo, en su política de búsqueda de la eficiencia y calidad, se está dando un proceso de transformación liderado por el rector, especialista Álvaro del Toro Martínez quien con su equipo de trabajo viene implementando una estrategia de reconocimiento del talento humano, tanto en los estudiantes como en los docentes y padres de familia.
Es evidente que esta institución crece y se desarrolla como una de las más llamativas tanto por el mejoramiento de su parte locativa y la creación de un ambiente físico agradable para el estudio y para el trabajo, como también por la motivación hacía la generación del sentido de pertenencia, al amor por el estudio y por la dedicación, mirando así a aquellos estudiantes, padres de familia y docentes que dejan su huella positiva y se constituyen en ejemplos a seguir para los demás.
Ya en el año 2010, se resaltó el trabajo de los doce mejores estudiantes, uno por cada grado desde transición hasta el grado once, en una ceremonia especial que incluyó un almuerzo con la asistencia de los padres de familia y la exhibición de un enorme pendón con la fotografía de los estudiantes.
En 2011, se desataca el reconocimiento a los 10 mejores por cada grado, con un imponente desfile por los alrededores de la institución y se premia al mejor grupo en rendimiento global y se exalta a los doce mejores.
El mejor grupo fue séptimo uno de la jornada vespertina, coordinado por el docente Eduardo Toscano y los doce mejores estudiantes de toda la institución fueron: Por el grado Transición, Sebastián Flores Salom; Primer grado, Jair Fernández Hernández; segundo grado, Andrea Ramos Parra; tercer grado, Fabián Bellido Contreras; cuarto grado, Natalia Álvarez Chamorro; quinto grado, Juan Mora Arroyo; sexto grado, Guillermo Angulo Díaz; Séptimo grado, Dayanne Fuentes Paternina; Octavo grado, Verónica Brieva Tovar; noveno grado, Kelly Márquez Toscano; décimo grado, Mayerlin Prasca Romero y once grado, Miguel Rada Paternina.
En el caso de los docentes, para el presente año se creó el incentivo a los más destacados, siendo los galardonados: Elsa Salinas de Álvarez por su reconocido espíritu solidario y altruista; Carmela Martínez Jiménez por su compañerismo y Gladys Quiñones Alandete por toda una vida como docente aportante al desarrollo institucional. Para el próximo año se tendrán en cuenta criterios como el espíritu investigativo y el sentido de pertenencia, entre otros.
Asimismo, desde la gestión directiva se trabaja en pro del alto rendimiento académico a futuro mediato, creando estímulos y espacios adecuados para este fin.